Disturbios en Francia: destrozan el monumento a las víctimas del Holocausto en Nanterre
La violencia desatada en toda Francia como consecuencia de la muerte de un joven que intentó escapar de la policía ha provocado destrozos en tiendas, mobiliario urbano y también a monumentos, como el dedicado a las víctimas del Holocausto en Nanterre.
Una horda de violentos campó a sus anchas, realizó pintadas en recuerdo de Nahel, el delincuente muerto por el disparo de un policía, e intentó quemar una bandera francesa en el monumento a las víctimas del Holocausto. La intervención de dos mujeres evitó que la vandalización del monumento fuera a más.
El resultado de la violencia desataca estos días en Francia a raíz de la muerte de Nahel ha dejado un balance de numerosos daños materiales en tiendas, bloques de viviendas, centros comerciales, mobiliario urbano y monumentos, como en el caso del monumento a las víctimas del Holocausto en Nanterre.
El ministerio del Interior anunció un total de 719 detenciones en todo el país en la madrugada del domingo, en particular por llevar objetos que pueden ser utilizados como armas o proyectiles.
En la madrugada del sábado la cifra había sido de 1.300 detenidos, la más alta desde el martes.
«Noche más tranquila gracias a la acción decidida de las fuerzas del orden», dijo el ministro del Interior, Gérald Darmanin, en Twitter.
Pese a ello unos 45 policías y gendarmes resultaron heridos, 577 vehículos y 74 edificios fueron incendiados y se registraron 871 incendios en vías públicas, dijo el ministerio el domingo.
Por segunda noche consecutiva, el ministro movilizó 45.000 policías y gendarmes, incluidos 7.000 en París y en los suburbios de la capital, con refuerzos importantes en Marsella (sur) y Lyon (centro este), las principales ciudades afectadas el día anterior por los enfrentamientos, las destrucciones y los saqueos.
El vídeo de la muerte del joven Nahel por un disparo a quemarropa de un policía durante un control de tráfico el martes en Nanterre, cerca de París, desató una ola de violencia en todo el país.
El presidente francés Emmanuel Macron, que el sábado decidió aplazar su visita de Estado a Alemania prevista de domingo a martes, vive su segunda gran crisis en pocos meses tras las manifestaciones contra la reforma de las pensiones.